Hemos compuesto una serie de criterios de evaluación, extrapolando directamente los objetivos planteados, y son los siguientes:
Cada criterio de evaluación lleva adjudicado un valor numérico, que de cumplirse satisfactoriamente, vendría a sumarse a la nota sobre 10 en este tema. En caso de presentarse problemas, cada ítem aporta unas indicaciones generales para aportar feedback que pueda ayudar a solucionar el problema tan pronto como se detecte. Si, pese a todo, el problema persevera, quedará a discrección del maestro otorgar una puntuación fraccionaria de la correspondiente a dicho criterio.
La guía está pensada para supervisar el trabajo en clase, y detectar los problemas más graves, pero para ayudar a detectar los resultados reales, usaremos unos cuestionarios, que se pasarán al final de cada sesión, durante la fase de asamblea, para que cada alumno se evalúe a sí mismo y a sus compañeros:
Finalmente, y tras la última sesión, pasaremos un cuestionario que evalúe las cuestiones más teóricas, junto con una evaluación recíproca, del alumno hacia la unidad.
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